Estudiar Historia es un proceso complicado, ya que habemos personas que no estamos acostumbrados a leer, ahora, enseñarla cuando no se conoce sus técnicas y estrategias, es mucho más difícil; en los últimos años la se ha criticado la forma de enseñarla, se ha clasificado en una historia aburrida, con muchas batallas, nombres y fechas, sin embargo, la historia es un estudio fundamental en la formación de los seres humanos.
Vivir actualizándose implica compromiso, tiempo y amor; durante el desarrollo de este curso de actualización, considero que se cumplen estas expectativas, al emplear las metodologías aprendidas, los beneficios serán factibles para el proceso enseñanza-aprendizaje, me permitirán involucrar más a los niños, despertando el interés en ellos a la vez que tengan un conocimiento muy firme, que lo puedan entender, razonar y adecuar al tiempo que están viviendo y así lograr un aprendizaje significativo.
Existen muchos métodos para enseñar historia, entre los más relevantes me llamo la atención trabajar a través de la narración permitiendo involucrar más temática y estructura en los textos, mientras que el planteamiento de la situación problema ayudara a elegir entre varias alternativas y tendrán la capacidad para problematizar su propia realidad, construyendo su aprendizaje.
¿Qué cambia con estas metodologías? Primeramente la forma de elaborar la planeación, y sobre todo ponerla en practica, también, llevar a cabo clases amenas e interesantes, que despierten el interés y curiosidad para trabajar todos los días, logrando que los pequeños sean críticos, reflexivos y que busquen y solucionen sus propios problemas educativos.
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